La Asociación Mundial de Boxeo (AMB) ha tomado una medida drástica al citar a los árbitros Thomas Taylor y Terence Crawford, en respuesta a las graves acusaciones de trampa lanzadas por el reconocido boxeador mexicano Saúl “Canelo” Álvarez. Este escándalo ha sacudido el mundo del boxeo profesional, generando un debate intenso sobre la integridad de los oficiales en el deporte. Canelo, quien recientemente defendió su título supermediano ante un rival de alto calibre, no ha dudado en expresar su frustración públicamente, alegando que decisiones arbitrales sesgadas le costaron puntos cruciales en la pelea.
Todo comenzó inmediatamente después del combate, cuando Álvarez, visiblemente molesto, se dirigió a la prensa en una rueda de post-pelea. “He visto cosas que no se pueden ignorar. Esos árbitros jugaron sucio, y es hora de que alguien lo diga”, declaró el púgil de 34 años, conocido por su temperamento fuerte y su dedicación al deporte. Sus palabras no cayeron en saco roto; la AMB, organismo regulador de peso mundial, actuó con rapidez para investigar las denuncias. La citación de Taylor y Crawford implica que serán interrogados exhaustivamente sobre sus decisiones durante el encuentro, que duró doce asaltos repletos de acción y controversia.
Thomas Taylor, un árbitro veterano con más de dos décadas en el ring, ha oficiado en numerosas peleas de título mundial. Su reputación ha sido impecable hasta ahora, pero en esta ocasión, Canelo lo acusa de haber permitido golpes bajos y de no detener a tiempo una secuencia que, según el mexicano, fue un intento claro de dañar su integridad física. Por su parte, Terence Crawford, quien curiosamente comparte nombre con el campeón welter Terence Crawford, es un oficial emergente que ha ganado notoriedad en las últimas temporadas. Álvarez lo señala por supuestamente favorecer al oponente en las puntuaciones, ignorando impactos limpios que el mexicano asegura haber conectado.
La AMB, en un comunicado oficial emitido esta mañana, enfatizó su compromiso con la transparencia y la equidad en el boxeo. “Cualquier alegación de irregularidades será investigada a fondo. La integridad del deporte es nuestra prioridad absoluta”, reza el documento. Fuentes internas revelan que la asociación ha solicitado videos detallados de la pelea, testimonios de los entrenadores y análisis independientes de las decisiones arbitrales. Esta no es la primera vez que Canelo se ve envuelto en polémicas; recordemos su disputa pasada con Gennady Golovkin, donde también cuestionó el veredicto. Sin embargo, esta vez las acusaciones van más allá, apuntando directamente a la posible corrupción en el arbitraje.
El impacto de este incidente se extiende más allá del ring. Patrocinadores como Under Armour y cervezas mexicanas han expresado preocupación, temiendo que el escándalo afecte la imagen de Álvarez, quien genera millones en taquillas. En redes sociales, el hashtag #CaneloVsArbitros ha tendencia mundial, con fans divididos: unos apoyan al ídolo mexicano, mientras otros defienden a los árbitros, argumentando que las decisiones son subjetivas. Expertos como el ex campeón Floyd Mayweather han salido a respaldar a Canelo, llamando a una reforma en el sistema de arbitraje.
Mientras tanto, Taylor y Crawford se preparan para comparecer ante la comisión de la AMB la próxima semana. Si se encuentran irregularidades, podrían enfrentar suspensiones o multas severas. Para Canelo, esta citación representa una validación de sus reclamos, y ha prometido continuar luchando no solo por títulos, sino por un boxeo limpio. El mundo espera ansioso los resultados de la investigación, que podrían redefinir las normas del deporte que tanto apasiona a millones. En un momento en que el boxeo busca recuperar su brillo post-pandemia, este caso subraya la necesidad de vigilancia constante para preservar su esencia pura y competitiva.
