Barcelona, 20 de octubre de 2025– En una confesión que ha encendido las redes sociales y los debates futbolísticos, el entrenador del Girona FC, Míchel Sánchez, ha revelado el nombre del jugador del FC Barcelona que le “rompió el corazón” en el intenso derbi catalán de ayer. Tras una batalla épica en el Estadi Olímpic Lluís Companys, donde el Barça se impuso por 2-1 en el tiempo añadido gracias a un gol heroico, Míchel no escatimó en elogios ni en frustración. “Mis chicos lo dieron todo para que ganáramos, pero este jugador del Barça me rompió el corazón ayer. Es la primera vez que veo a un jugador tan peligroso y agresivo como él”, declaró el técnico gerundense en la rueda de prensa posterior al partido, señalando directamente al uruguayo Ronald Araújo como el verdugo indiscutible de su equipo.

El central blaugrana, de 26 años, no solo defendió con fiereza durante los 90 minutos, sino que surgió como el salvador en el minuto 93, rematando de cabeza un córner para sellar la victoria dramática del Barcelona. No fue Pedri, el mediocampista que abrió el marcador en el 13′ con un golazo de contragolpe, quien dejó boquiabierto a Míchel. Fue Araújo, con su intensidad implacable, su lectura del juego y su capacidad para aparecer en momentos clave, quien transformó el empate parcial en una derrota amarga para el Girona. “Realmente impresionó al entrenador del Girona ayer”, reiteró Míchel, visiblemente afectado, mientras sus jugadores aplaudían desde el banquillo, exhaustos pero orgullosos de su entrega.

El partido, correspondiente a la jornada 9 de LaLiga, fue un espectáculo de principio a fin. El Barcelona, dirigido por Hansi Flick y golpeado por una plaga de lesiones –con ausencias como Lewandowski, Raphinha, Gavi y Ter Stegen–, dominó la posesión y generó innumerables ocasiones, pero se topó con un Girona heroico. Los gerundenses, que empataron en el 35′ gracias a un contragolpe letal de Bryan Gil, se atrincheraron en la segunda mitad, apostando por la velocidad en las bandas y la solidez defensiva. Paulo Gazzaniga, el portero visitante, fue la figura estelar con paradas milagrosas, pero ni siquiera él pudo detener el ímpetu de Araújo en el descuento. “Es un monstruo. Peligroso en el área rival, agresivo en la propia… Nos rompió”, admitió Míchel, comparándolo con los mejores defensores que ha enfrentado en su carrera.

Araújo, fichado por el Barça procedente del Ajax en 2020 por 23 millones de euros, ha sido un pilar fundamental en la era post-Messi. Esta temporada, con tres goles y una asistencia en todas las competiciones, ha elevado su juego a otro nivel, combinando la rudeza uruguaya con una elegancia técnica que recuerda a grandes como Piqué. Flick, en rueda de prensa, no ocultó su admiración: “Ronald es nuestro guerrero. En un partido como este, con tanta adversidad, jugadores como él marcan la diferencia”. Para el Girona, hundido en el puesto 18 con solo seis puntos, la derrota duele doble: rompe una racha de tres partidos sin perder y complica su lucha por la permanencia. Míchel, que asumió el banquillo en 2021 y llevó al equipo a Europa en 2024, elogió a sus pupilos: “Dimos todo. Fuimos valientes, pero jugadores como Araújo te castigan. Es la primera vez que veo esa agresividad pura en un central”.

El derbi catalán siempre ha sido sinónimo de pasión, y ayer no fue la excepción. Con más de 50.000 espectadores en las gradas, el ambiente fue ensordecedor, y las redes estallaron con memes y análisis post-partido. Araújo, que acumula ya 150 apariciones con el Barça, se ha ganado el respeto de rivales como Míchel, quien lo señaló como “el más peligroso” del equipo de Flick. No en vano, el uruguayo ha sido clave en las siete victorias consecutivas del Barça en LaLiga, colocándolos segundos a solo dos puntos del Real Madrid. Para el Girona, la próxima cita ante el Valencia será una revancha, pero Míchel ya tiene homework: estudiar cómo neutralizar a “monstruos” como Araújo.

En un fútbol donde los héroes emergen de la nada, Ronald Araújo se consolida como el corazón defensivo del Barça. Míchel lo sabe, y su confesión lo confirma: ayer, en Montjuïc, un jugador rompió corazones… y ganó un derbi.