Tras la sufrida victoria del Barcelona ante el Girona, Pedri desató una tormenta mediática al criticar abiertamente a dos compañeros en el vestuario: “Algunos corren sin saber por qué corren — si seguimos jugando así, la camiseta del Barcelona les queda demasiado grande.” Sus palabras se propagaron rápidamente y encendieron a toda la prensa deportiva española.
El Barcelona logró una victoria muy ajustada por 2-1 ante el Girona en Montjuic, pero lo que debía ser una noche de celebración terminó convirtiéndose en una tormenta dentro del vestuario culé. Las declaraciones de Pedri encendieron todas las alarmas.

El centrocampista canario, normalmente reservado y prudente ante los medios, sorprendió a todos al lanzar una dura crítica hacia dos de sus propios compañeros tras el partido. Sus palabras, filtradas por una fuente cercana, dieron la vuelta a España.
“Algunos corren sin saber por qué corren — si seguimos jugando así, la camiseta del Barcelona les queda demasiado grande”, habría dicho Pedri, visiblemente molesto por la falta de compromiso de ciertos jugadores en el tramo final del encuentro.
SEO-wise, las búsquedas de “Pedri críticas vestuario”, “Pedri Girona declaraciones” y “problemas internos en el Barcelona” se dispararon en cuestión de minutos, demostrando el impacto mediático de la frase que rompió el silencio del vestuario.
Según fuentes del club, los jugadores señalados por el comentario serían Fermín López y Toni Fernández, este último un joven de solo 18 años que debutó recientemente con el primer equipo bajo las órdenes de Hansi Flick.
Ambos futbolistas fueron titulares ante el Girona, pero su rendimiento dejó mucho que desear. Toni, nervioso y errático en el pase, perdió varios balones en la salida. Fermín, por su parte, se mostró desconectado y falto de intensidad defensiva.
Durante la segunda parte, el Barcelona sufrió para mantener el resultado. El Girona presionó con fuerza, y algunos errores en la medular encendieron la frustración de Pedri, quien asumió la responsabilidad de mantener el orden táctico del equipo.
El gesto del canario fue evidente en el campo: brazos levantados, miradas de desaprobación y gritos de instrucción hacia sus compañeros más jóvenes. Lo que parecía simple tensión competitiva acabó convirtiéndose en un episodio que marcaría el postpartido.
En el vestuario, según relató Mundo Deportivo, Pedri pidió “más concentración y orgullo” a los jugadores más jóvenes, recordándoles que “cada minuto con esta camiseta es un privilegio, no una excusa para equivocarse.”
La escena fue descrita como “tensa pero sincera”. Algunos veteranos, como Ter Stegen y Lewandowski, apoyaron el mensaje del centrocampista, considerándolo necesario después de una actuación irregular que pudo costar los tres puntos.
Sin embargo, el eco mediático fue inevitable. En pocas horas, los titulares se multiplicaron: “Pedri explota en el vestuario del Barça”, “Pedri señala a dos jóvenes” y “Crisis interna tras el Barcelona-Girona” dominaron las portadas deportivas.
El propio Hansi Flick, cuestionado por la gestión del grupo, intentó calmar la situación. “Pedri es un líder natural. Habla desde la pasión y la exigencia, no desde la crítica destructiva,” explicó el entrenador alemán en conferencia de prensa.
Aun así, las redes sociales estallaron con miles de comentarios divididos. Algunos aficionados aplaudieron el gesto del canario, asegurando que “alguien tenía que decirlo.” Otros lo consideraron “una falta de respeto hacia los jóvenes.”
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Según varios periodistas, Pedri ya habría hablado en privado con Fermín y Toni para aclarar la situación. El canario insistió en que su intención nunca fue humillar, sino despertar la competitividad que exige vestir la camiseta azulgrana.
“Yo también fui joven y cometí errores, pero hay que entender dónde estás. Aquí no hay margen para relajarse,” habría dicho Pedri en la reunión, según informó Cadena SER. Las palabras fueron recibidas con respeto dentro del grupo.
Por su parte, Toni Fernández, debutante del filial, habría reconocido su flojo rendimiento. “Me sentí nervioso, pero solo puedo aprender de esto. Pedri tiene razón: vestir esta camiseta te obliga a darlo todo,” comentó a su entorno cercano.
Fermín López, en cambio, mostró algo más de incomodidad con la situación, aunque no quiso alimentar la polémica. “Las cosas del vestuario se quedan en el vestuario,” dijo brevemente a los periodistas tras salir del entrenamiento.
El Barça, pese al clima tenso, continúa en buena dinámica de resultados, con Flick decidido a fortalecer la unión del grupo. “Estos momentos también construyen equipos fuertes,” comentó el técnico, restando dramatismo al episodio.
A nivel táctico, la actuación de Pedri contra el Girona fue sobresaliente. Marcó un gol decisivo y mantuvo la posesión en los tramos más difíciles del partido. Su rendimiento contrastó con la irregularidad de los dos jóvenes señalados.
En el minuto 90+3, Ronald Araújo marcó el gol de la victoria tras un córner de Gündoğan, desatando el delirio en Montjuic. Pero incluso en medio de la euforia, Pedri parecía pensativo, consciente de que el equipo no había jugado su mejor fútbol.
La prensa catalana interpretó sus palabras como una llamada de atención a toda la plantilla. “Pedri quiere un Barça más competitivo, más concentrado y más fiel a su ADN,” escribió Sport en su análisis posterior al partido.
Mientras tanto, Hansi Flick planifica el próximo compromiso sin perder de vista la convivencia interna. “Prefiero un vestuario con carácter que uno lleno de silencio,” comentó el técnico, defendiendo la autocrítica como parte del proceso de madurez.
En el entorno culé, la opinión general es que Pedri actuó como un verdadero líder. Muchos recuerdan que leyendas como Xavi Hernández o Carles Puyol también fueron duros en sus primeras etapas para exigir excelencia al grupo.
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El caso también reabrió el debate sobre la presión que enfrentan los jóvenes en el Barça. Varios analistas señalaron que el club necesita acompañar la formación futbolística con un soporte psicológico más fuerte para los debutantes.
De cualquier modo, la frase de Pedri ya quedó grabada como una de las más potentes de la temporada. “Algunos corren sin saber por qué corren” resume la exigencia, la frustración y el orgullo de un jugador que no acepta la mediocridad.
En el fondo, lo ocurrido refleja una realidad: el Barça está en reconstrucción, y los jóvenes deben aprender que el talento no basta. En el vestuario azulgrana, la camiseta pesa tanto como la historia que representa.
A medida que el equipo se prepara para su próximo duelo, el ambiente parece haberse calmado, pero la lección permanece. Pedri habló como un líder — y su voz, guste o no, marcó un antes y un después dentro del vestuario del Barcelona.