Novak Djokovic hace temblar al US Open: ¿Una despedida velada a Boris Becker?
El US Open 2025 no solo regaló emociones intensas dentro de la pista, sino también fuera de ella. Novak Djokovic, tras su participación en el torneo, encendió todas las alarmas con unas declaraciones que muchos interpretaron como un mensaje de despedida dirigido a Boris Becker, su exentrenador y figura clave en una de las etapas más exitosas de su carrera.
“Sonó como un adiós”
En rueda de prensa, el serbio dejó escapar unas palabras que sorprendieron incluso a los periodistas más veteranos:
“Él puede batir récords, pero nuestra historia siempre quedará. No sé si nos volveremos a ver en estas circunstancias.”
Aunque Djokovic no mencionó explícitamente una ruptura definitiva, el tono de sus declaraciones fue interpretado por muchos como un adiós simbólico a Becker, con quien compartió victorias memorables en Grand Slams y una relación marcada por altibajos.
El peso de una relación histórica
Boris Becker y Novak Djokovic trabajaron juntos entre 2014 y 2016, un periodo en el que el serbio conquistó múltiples títulos y consolidó su posición en la élite del tenis. La química entre ambos parecía indestructible, pero con el tiempo se fueron distanciando. Que ahora Djokovic utilice un lenguaje que suena a despedida definitiva ha sacudido al circuito.
Reacciones en el mundo del tenis
Las palabras del serbio no tardaron en generar debate. Algunos expertos opinan que se trató de un comentario emocional, fruto de la presión del torneo. Otros, en cambio, sostienen que Djokovic quiso enviar un mensaje claro: la era Becker en su vida está completamente cerrada.
En redes sociales, los fanáticos se dividieron. Mientras unos lamentaban lo que perciben como el final de una era dorada, otros celebraban que Djokovic esté listo para escribir un nuevo capítulo sin las sombras del pasado.
Conclusión
El US Open 2025 quedará marcado no solo por el nivel deportivo, sino por la polémica declaración de Novak Djokovic, que resonó como un adiós definitivo a Boris Becker. Una frase que, más allá del resultado en la pista, abre interrogantes sobre el futuro del campeón serbio y sobre cómo enfrentará la recta final de su carrera.
